A veces lo escuchamos en la primera entrevista, a veces lo cuenta una persona que nos conoce bastante después de un cierto tiempo de trabajar juntos.
Los motivos suelen ser muy variados, algunas personas piensan que nadie les puede ayudar, que es un problema único que sólo a ellos les pasa, a veces se identifica al psicólogo con la enfermedad mental, o que cada uno tiene que salir solo de sus problemas…
También pesa mucho la incomodidad de explicarle a un desconocido cosas que uno no suele hablar con nadie, ni con los más cercanos.
Respecto de la identificación del psicólogo con la enfermedad mental, nada más lejos de eso. La gran mayoría de las personas que acuden al psicólogo tienen dificultades emocionales, conflictos morales, sufren por sus ideas o sentimientos, o atraviesan períodos de la vida en la que las cosas cambian y cuesta adaptarse. También crisis de crecimiento y desarrollo personal, temas de autoestima o ansiedad frente a diferentes aspectos vitales.
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